Cualquier fotografía de buena calidad en formato adecuado es válida. Para la orientación, piensa en el permiso de conducir o la fotografía del pasaporte.
El diseñador gráfico, en un programa especializado, traza los rasgos del rostro al crear el diseño del molde de galleta, preservando su posición y expresiones.
Para que la copia se asemeje al original, el rostro en la foto debe estar de frente y ser natural, con características reconocibles como gafas o bigote.